Nuevo Atlas Europeo de las Aves Reproductoras, un hito para la investigación de la biodiversidad y la conservación de la naturaleza
Se publica un nuevo Atlas Europeo de las Aves Reproductoras (EBBA2), iniciativa del European Bird Census Council y con información actualizada sobre su distribución y abundancia, con altos estándares científicos y un enfoque de ciencia ciudadana.
La nueva publicación se presentó el 3 de diciembre de 2020 y se basa en su predecesor, el atlas de aves reproductoras europeas EBCC, publicado en 1997 con datos de la década de 1980, así como para documentar los cambios desde el primer atlas.
El trabajo de campo se ha llevado a cabo entre 2013 y 2017 y se han registrado 539 especies de aves nativas que se reproducen en Europa, 59 de los cuales se concentran principalmente en el continente (casi endémicas) y 40 que sólo se pueden encontrar en este territorio (endémicas). Hay pocas especies tan extendidas como la lavandera blanca Motacilla alba o el cuco Cuculus canorus, que se encontraron en más del 85% de las cuadrículas de 50x50 km durante este estudio, que ha implicado dividir Europa en 5.300 cuadrículas de 50x50 km. Más del 50% de las especies se registraron en menos del 10% de las cuadrículas estudiadas. Por tanto, se puede afirmar que cada territorio tiene una responsabilidad concreta en la conservación de esta riqueza común.
Una de cada 10 especies, recién llegada
Los datos de la segunda edición del atlas muestran que 57 especies no autóctonas se reproducen actualmente en Europa, es decir, una de cada 10 especies de aves nidificantes en Europa ha sido introducida desde otros lugares. Además, 39 de estas especies han sido documentadas por primera vez en los 30 últimos años.
A pesar de los pronunciados cambios en los paisajes y el clima europeos, muy pocas especies autóctonas han desaparecido completamente. Este es, sin embargo, el caso del torillo andaluz, Turnix sylvaticus. Unas pocas especies han colonizado de forma natural el continente europeo, como el vencejo moro, Apus affinis. Sin embargo, se observan cambios marcados en la avifauna europea en los últimos 30 años. Según los análisis del EBBA2, el 35% de todas las especies autóctonas aumentó la superficie en la que se reproducen, entre ellas la garcilla bueyera, Bubulcus ibis, la lavandera cetrina, Motacilla citreola, o la gaviota cabecinegra, Larus melanocephalus. Por otra parte, el 25% de las especies ha mostrado una disminución de superficie ocupada, por ejemplo, el combatiente Calidris pugnax, la avutarda Otis tarda, la carraca europea, Coracias garrulus, o el escribano hortelano, Emberiza hortulana. Además, las zonas de cría de las aves europeas se ha desplazado hacia el norte una media de 28 km (aproximadamente 1 km por año).
Sergi Herrando –del equipo de coordinación de la EBBA2 e investigador del Institut Català d’Ornitologia (ICO) y del CREAF– apunta que "los nuevos usos del suelo y el cambio climático parecen ser los principales impulsores de los cambios observados y deberán ser investigados más a fondo. En concreto, el norte de Europa ha ganado especies mientras que el sur ha experimentado pérdidas, a menudo de especies de aves propias de las tierras agrícolas y los pastos, en concreto en la región mediterránea y en Europa occidental y central".
Esto concuerda con la información existente sobre la disminución de muchas poblaciones de aves propias de espacios cultivados debido a las prácticas agrícolas intensivas. A la vez, muchas especies desplazan sus áreas de distribución hacia el norte y la riqueza de especies de aves forestales aumenta, probablemente como resultado del abandono de las tierras que da lugar a la regeneración de los bosques. Otro dato que se detalla en el atlas es la pérdida de la distribución de aves en los prados de alta montaña y en la tundra ártica.
"Los nuevos usos del suelo y el cambio climático parecen ser los principales impulsores de los cambios observados y deberán ser investigados más a fondo"
SERGI HERRANDO, del equipo de coordinación de la EBBA2 e investigador del Institut Català d’Ornitologia (ICO) y del CREAF.
Otro investigador del CREAF involucrado en este trabajo es Lluís Brotons, del CREAF-CTFC, para quien "el Atlas es un sueño hecho realidad que ha implicado 120.000 personas".
La interpretación de Petr Voříšek –del equipo de coordinación de la EBBA2 de la Sociedad Checa de Ornitología– es que la política medioambiental tiene un efecto positivo. "Muchas especies de interés para la conservación europea sufren pérdidas de distribución, pero también hay casos que muestran el buen funcionamiento de la conservación de la naturaleza. Muchas especies protegidas por la legislación internacional, como el pigargo europeo, Haliaeetus albicilla, han aumentado su distribución en Europa. Esto se puede observar también, por ejemplo, en el aumento de la distribución del área de cría de varias especies de humedales continentales que se beneficiaron de una mejor protección de las especies y los hábitats. Es el caso del avetoro común, Botaurus stellaris, o la avoceta común, Recurvirostra avocetta".
De las Azores en los Urales
La segunda edición del Atlas de las aves nidificantes de Europa representa un nuevo marco de conocimiento sobre la avifauna europea, con una cobertura geográfica sin precedentes, desde las Azores hasta los Urales. Este atlas es también uno de los proyectos de ciencia ciudadana más grandes de la historia de la cartografía de la biodiversidad. En total, alrededor de 120.000 personas han aportado datos al atlas a partir de trabajo de campo, la gran mayoría de ellos de forma voluntaria. Verena Keller –directora del proyecto EBBA2, autora principal, integrante del Instituto Ornitológico Suizo y de la junta de la EBCC– asegura que el atlas "sólo ha sido posible gracias a la red de organizaciones e individuos del Consejo Europeo de Censos de Aves que engloba todos los rincones de Europa, todos ellos dedicados a un objetivo común, cooperando a más allá de todas las fronteras y barreras".
"El Atlas Europeo de las Aves Reproductoras solo ha sido posible gracias a la red de organizaciones y personas del Consejo Europeo de Censos de Aves que engloba todos los rincones de Europa, todos ellos dedicados a un objetivo común: cooperar a más allá de todas las fronteras y barreras"
VERENA KELLER, autora principal y directora del proyecto EBBA2, integrante del Instituto Ornitológico Suizo y de la junta del EBCC.
Los resultados de EBBA2 se publican en un libro completo en colaboración con Lynx Edicions. Está previsto publicar más adelante una versión interactiva en línea, que contendrá todos los mapas del atlas. Mark Eaton –presidente del Consejo Europeo de Censos de Aves– es optimista ante el futuro y asegura que "este increíble nuevo libro y la base de datos que lo sustenta permitirá aumentar la investigación y apoyará la conservación de las aves y del conjunto de la biodiversidad en toda Europa durante las próximas décadas".
Iván Ramírez –responsable de Conservación de BirdLife Europa y Asia Central– afirma que se trata de una "publicación clave que debería guiar el futuro trabajo de conservación en nuestra región del planeta. Ayuda a los profesionales a comprender los cambios de distribución de todas las especies a lo largo de los años y, por tanto, pone claramente de relieve donde se realizarán las acciones de conservación de las especies y de restauración del hábitat en nuestra región".
Juan Carlos del Moral –coordinador de Ciencia Ciudadana de SEO/BirdLife– asegura que “el nuevo Atlas Europeo es un gran avance en la actualización de la distribución de todas las especies de aves en Europa. Un gran trabajo, impensable sin la participación de miles de voluntarios de SEO/BirdLife que han colaborado con su tiempo y dedicación en trabajos de campo por toda España a lo largo de todos estos años”. El proyecto no habría sido posible sin la dedicación de las personas que han hecho trabajo sobre el terreno, las coordinaciones nacionales, las personas que han contribuido al análisis y la presentación de los datos y las entidades y personas donantes, entre otros colaboraciones.
Contribución desde España y Cataluña
El Atlas europeo de las aves reproductoras ha sido coordinado desde Barcelona, Praga (Chequia) y Sempach (Suiza). El Instituto Catalán de Ornitología (ICO), actuando bajo la dirección de la European Bird Census Council, EBCC, ha tenido un papel clave en la coordinación de los 48 países que han participado en el Atlas. Para ello, ha recibido el apoyo del Centro de Ciencia y Tecnología Forestal de Cataluña (CTFC), el CREAF, el Zoo de Barcelona y el Museo de Ciencias Naturales de Barcelona. Un equipo de especialistas en ornitología y técnicos de diferentes disciplinas han contribuido de forma especial a la formación técnica y científica, impulsando jornadas de trabajo y expediciones internacionales de cooperación, en especial en 20 países del sur y este de Europa. Esto ha sido posible gracias a la experiencia que el ICO ha adquirido durante muchos años de trabajo en estrecha colaboración con el Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalidad de Cataluña.
En España, los datos del Atlas de Europa se enmarcan en el contexto del III Atlas de las aves en época reproductora en España 2014-2018, coordinado por SEO/BirdLife (Sociedad Española de Ornitología), y en Cataluña en el del III Atlas de las aves nidificantes de Cataluña 2015-2018. En un futuro próximo, cada uno de estos trabajos dará una perspectiva muy cuidadosa del territorio de estudio. Ahora bien, hoy el EBBA2 avanza mucha información sobre lo que está pasando en la Península Ibérica. Uno de los elementos más destacables es el alto valor de la avifauna de la península ibérica en relación al conjunto de Europa occidental, tal como lo muestra la presencia en la península de una gran cantidad de especies de interés de conservación para la Unión Europea. Por otro lado, el EBBA2 hace patente que nuestro territorio todavía tiene retos muy importantes a los que debe hacer frente, por ejemplo, muestra especies en clara regresión en la península en estos últimos 30 años: la ganga ibérica, Pterocles alchata, el águila perdicera, Aquila fasciata, o el escribano palustre Emberiza schoeniclus.