¿Tener más cabras pastando por el bosque disminuye el riesgo de incendio?
El proyecto Silvodivers quiere descubrir si la silvopastura puede ser una aliada para reducir el riesgo de incendios a la vez que se conserva la biodiversidad del bosque.
El año 2023 empieza con una fuerte sequía y una escasez creciente de agua en todo el país. Más allá de los impactos que esto tiene sobre los usos que hacemos del agua -agricultura, industria, consumo doméstico, etc.-, una de las consecuencias más preocupantes de este escenario es que incrementa la probabilidad de tener pequeños y grandes incendios en verano. Por eso, desde la ciencia se están buscando más soluciones para reducir este riesgo de incendio a través de la gestión forestal, la restauración y protección de los ecosistemas naturales y otras medidas de prevención que pueden disminuir la carga de combustible de nuestros bosques. Es en esta línea que las investigadoras Sandra Saura Mas, también profesora de la UAB, y Lidia Quevedo ponen en marcha el proyecto Silvodivers para analizar el pastoreo de ganado a través del bosque, lo que se conoce como silvopastura, y descubrir si a la vez que las manadas se alimentan del sotobosque, eliminan la masa forestal más inflamable y protegen nuestros bosques y su biodiversidad ante algunos incendios. En concreto, el estudio se centrará en el pastoreo de cabras y ovejas y ya cuentan con la participación de más de 100 pastoras y pastoras y sus manadas.
“Me imagino el proyecto como un triángulo que combina la prevención de incendios, la conservación de la biodiversidad y la sostenibilidad social y económica ganadera”.
SANDRA SAURA, coordinadora del proyecto, investigadora CREAF y profesora UAB.
Más allá de la investigación ambiental para descubrir si este pastoreo puede ayudarnos en la gestión de incendios y mantener la biodiversidad del bosque, Silvodivers quiere entender la silvopastura también desde una perspectiva social y económica. El equipo de investigación se plantea si la silvopastura puede ser un modelo de ganadería sostenible que beneficie nuestros ecosistemas al mismo tiempo que mantiene el sector productivo a nivel local. Por este motivo, elegirán unas 30 pastoras y pastores de las 100 iniciales localizadas hasta el momento y las entrevistarán para conocer su funcionamiento día a día, costes económicos que tienen que afrontar, y qué necesidades y preocupaciones tienen. “El resultado tienen que ser herramientas y metodologías para apoyar ganaderos y ganaderas en un pastoreo que se entrevé exitoso y beneficioso económicamente y compatible y promotor de la conservación de la biodiversidad forestal, la disminución del riesgo de incendio y la mitigación del cambio climático”, explica Saura-Mas.
El proyecto tendrá una duración de 2 años y recibe el apoyo de la Escola de Pastors de Catalunya, l’Associació de pastors i pastores formatgers dels Països Catalans, el área forestal de bomberos de la Generalitat, la Fundació Pau Costa, la APF Lluçanès, la federación BOSCAT y la financiación del Departamento de Acción Climática, Agenda Rural y Alimentación.
Actividad financiada a través de la Operación 01.02.01 de Transferència Tecnològica del Programa de desenvolupament rural de Catalunya 2014-2022.