LiquenCity

A pesar de la gran importancia que tiene para la salud de la ciudadanía la calidad del aire que respiran, la percepción del problema no es general al conjunto de la ciudadanía, y a menudo no se entienden las medidas tomadas para mitigar los niveles excesivos de ciertos contaminantes. La mejora de la calidad del aire en las ciudades y su transición hacia ciudades más sostenibles requiere de la participación de la gente: aportando conocimiento, tomando decisiones y cambiando nuestros hábitos.

El uso de bioindicadores nos permite tener una mayor red de puntos de muestreo y mejorar la estima de los niveles de contaminación atmosférica a un bajo coste. Se ha demostrado que la diversidad de líquenes está inversamente correlacionada con el número de muertes debidas a cáncer de pulmón, por lo que su uso como bioindicador permite, además, hacer predicciones importantes para la salud humana (Cislagui & Nimis 1997).

Los líquenes suponen sin duda alguna el mejor ejemplo de bioindicador de la contaminación atmosférica. Por ello se utilizan habitualmente como bioindicadores de los niveles de cambio derivados de las actividades humanas. William Nylander (1866) fue el primer investigador que observó la desaparición de los líquenes según se adentraba en el centro de París durante el auge de la revolución industrial. Desde entonces, se han publicado más de 2.000 trabajos científicos utilizando líquenes como bioindicadores de la calidad del aire y de los niveles de contaminación por dióxido de azufre, óxidos de nitrógeno, metales pesados, etc. en los cinco continentes

El objetivo principal del proyecto es sensibilizar y concienciar a la población urbana de Madrid y Barcelona sobre los efectos de los contaminantes atmosféricos y su incidencia en la salud, a través de su participación activa en la monitorización y seguimiento de los líquenes epífitos que conviven con nosotros en las grandes ciudades.

La población urbana de Madrid y Barcelona, especialmente el alumnado de centros de secundaria y formación profesional, llevaran a cabo muestreos estandarizados para averiguar la diversidad y abundancia de líquenes epífitos (que crecen sobre árboles). Esta aproximación de la ciencia ciudadana a la bioindicación de la contaminación atmosférica se completará con muestreos sistemáticos mediante expertos liquenólogos utilizando protocolos estandarizados a nivel europeo. Estos dos conjuntos de datos ayudarán a evaluar la contaminación atmosférica de estas ciudades, conocer qué agentes contaminantes hay implicados y establecer criterios y medidas correctoras de la calidad del aire y de mejora de la salud pública que se puedan implementar en los planes de gestión municipales.

Pretendemos formar a la ciudadanía (escolares, educadores, naturalistas, voluntarios ambientales y otros colectivos sociales) a través de la impartición de jornadas de formación y de la distribución de manuales y fichas acerca de la metodología y la identificación de las especies de líquenes. Nuestra intención es capacitar a ciudadanos para que sean capaces de detectar y cuantificar la presencia de los líquenes en los diferentes distritos de Madrid y Barcelona y, por consiguiente, sensibilizar a la población urbana de estas dos ciudades sobre los efectos de los contaminantes atmosféricos y su incidencia en la salud, que es el objetivo principal de este proyecto. Las observaciones quedarán registradas en la plataforma Natusfera, donde un equipo de expertos llevará a cabo su revisión.