Jugando con piedrecitas
Decir que el fenómeno de la globalización lo está cambiando todo no es ninguna novedad. Como tampoco lo sería apuntar que las nuevas tecnologías de información y comunicación, las finanzas especuladoras, el comercio mundial, el transporte y el turismo son las puntas de lanza de este proceso que ha llegado hasta el último rincón del planeta. Ya hemos hablado de ello bastante últimamente como para que quienes hayan querido enterarse sean ya suficientemente conscientes.