El ozono afecta las plantas, los insectos y los microorganismos y es ya una amenaza para la biodiversidad mundial
Un estudio en el que ha participado Josep Peñuelas del CREAF, y publicado en Science Advances, afirma que en 2100 la biodiversidad de la cuenca del Mediterráneo, Japón o África ecuatorial estará amenazada por el incremento de ozono en la atmósfera.