En el CREAF todavía resuena la celebración del congreso ibérico de ecología de este año: el SIBECOL 2022. Desde el 2019, este acontecimiento reúne a los y las especialistas en ecosistemas terrestres y acuáticos de España y Portugal que quieren mejorar la gestión de la naturaleza y mitigar los efectos del cambio global.

Este 2022 el escenario del encuentro ha sido Aveiro, una ciudad lusitana acogedora con una cultura y una naturaleza fascinantes, especialmente por la Ría de Aveiro. Según el investigador del CREAF Rubén Olmo esta laguna es un verdadero refugio de biodiversidad, con todo tipo de especies de aves y peces, y una postal en movimiento gracias a que sus mareas pintan diferentes imágenes a lo largo del día.

Al congreso asistieron más de 15 investigadores e investigadoras del CREAF, entre las que destacan Alba Llovet por haber ganado el premio al mejor póster dentro la categoría Early Career: Links between plant sown diversity and water and nutrient use efficiency in a Mediterranean grassland.

Olmo también participó con un póster y una presentación sobre la monitorización de las principales bioregiones climáticas en suelos forestales de Cataluña, el tema de su tesis en curso. Otros investigadores e investigadoras del CREAF colaboraron en la organización de sesiones. Luciana Jaime y Jordi Margalef se encargaron de la mesa sobre perturbaciones y resiliencia de sistemas terrestres, marinos y de agua dulce en el contexto del cambio climático. Por su parte, Stefania Mattana y Ángela Ribas estuvieron detrás de una sesión sobre tecnologías para capturar carbono atmosférico y otras emisiones contaminantes (NETs, por sus siglas en inglés), donde hablaron la propia Mattana y Pilar Andrés.

“Las ponencias fueron muy enriquecedoras y nos dieron una amplia visión de los diferentes enfoques y metodologías utilizados. Además, pudimos disfrutar de un espacio de debate y reflexión como cierre de sesión con aportaciones de los participantes y asistentes”.

LUCIANA JAIME, investigadora del CREAF.

Los y las asistentes con quién hablamos coinciden en que el viaje superó sus expectativas, tanto por las charlas, la gran cantidad de asistentes y los contactos que pudieron establecer en el propio congreso, como por la riquísima oferta gastronómica, artística y natural del lugar. Acabamos con esta inmejorable imagen mental que nos regala Llovet:

“De manera similar a los intrincados patrones de las baldosas que tapizan la ciudad de Aveiro, el congreso SIBECOL fue una amalgama de diferentes disciplinas dentro de la ecología. Este alto grado de complementariedad en los nichos de investigación de los asistentes propició un ambiente enriquecedor e inspirador que seguro puede dar lugar a colaboraciones muy fructíferas. Realmente tanto el congreso SIBECOL como la ciudad de Aveiro me dejaron buen sabo de boca y ¡no solo por sus famosos ovos molas!"

ALBA LLOVET, investigadora del CREAF