Las emisiones de las flores in crescendo por los efectos del cambio global
Un estudio realizado por el CREAF revisa diversos aspectos de los compuestos volátiles que emiten las flores. Se ha encontrado que las plantas pueden dar acciones de atracción y de defensa simultáneamente, causando la desorientación de los polinizadores. También se han detectado cambios en las emisiones debido al cambio global.
La revisión publicada en la revista Perspectives in Plant Ecology, Evolution and Systematics, la han realizado un equipo de investigadores del CREAF formado por Gerard Farré-Armengol, Iolanda Filella, Joan Llusià y Josep Peñuelas. Su estudio se centra en los patrones de emisión de compuestos orgánicos volátiles por parte de las flores, así como los lugares más habituales donde se dan los patrones. Además, también muestra el efecto que puede inducir el cambio global sobre estas emisiones.
Los compuestos orgánicos volátiles (COV) permiten la comunicación química de las plantas con los organismos. Varios tejidos de la planta, como las flores, expulsan estos compuestos en forma de emisiones, que pueden tomar forma de néctar, polen, etc ...
Se han descrito, por ejemplo, patrones temporales de emisión de las flores que se ajustan a las horas de actividad de sus polinizadores (diurno / nocturno). También se ha observado que algunas plantas emiten olores engañosas que inducen a pensar que disponen de recompensa cuando no es así. Esto lo logran normalmente imitando la composición del olor de plantas vecinas que sí que ofrecen. Pero sobre todo se ha encontrado que las flores emiten sustancias volátiles de atracción y defensa de forma simultánea. Este hecho, genera conflictos de intereses con respecto a los diferentes visitantes en muchas ocasiones, ya que el efecto repelente afecta polinizadores y herbívoros por igual.
La defensa se basa en emitir elementos tóxicos o repelentes (que originen rechazo o incluso toxicidad). Lo que sucede en muchos casos es que durante el periodo de floración las plantas repelen aquellos visitantes que no les interesan, pero también aquellos que hacen posible la polinización.
Por otra parte, se ha visto que el cambio global puede afectar positivamente las emisiones de las flores. En la mayoría de casos observados, los factores de cambio global, como el aumento de la temperatura o la sequía (ya sea por efectos directos o bien porque provoca estrés en la planta), inducen a un aumento de las emisiones volátiles de las flores. Este hecho se ha observado extensamente en estudios hechos sobre las emisiones de las hojas y se ha podido extrapolar a nivel floral. El aumento de emisiones puede incrementar el tamaño de la señal olfativo emitido o puede inducir a cambios en la composición de los olores. Con el cambio global también aumenta la volatilidad de los compuestos (velocidad de evaporación).
Aunque se ha estudiado muy a fondo cómo son estas emisiones ya qué mecanismos responden, Gerard Farré asegura que falta vincular el campo que estudia los cambios que se producen en las emisiones y las respuestas de los animales a estas emisiones modificadas.