Las 12 consecuencias del cambio global en las montañas
[Este artículo ha sido escrito junto con Carla Kühleis, durante su estancia en el CREAF realizando prácticas de comunicación internacional.]
[Este artículo ha sido escrito junto con Carla Kühleis, durante su estancia en el CREAF realizando prácticas de comunicación internacional.]
La biodiversidad y la crisis climática están inextricablemente entrelazadas y no pueden abordarse ni resolverse de forma independiente la una de la otra. Aunque el relato global ha tendido a centrarse en el cambio climático, la ciencia señala que la naturaleza es una aliada fundamental en la lucha contra el cambio climático y la pérdida de la naturaleza.
El 7 de noviembre, el Parlamento Europeo fue el escenario de un seminario inédito titulado "La necesidad de la gestión de los bosques. El caso de los bosques mediterráneos", organizado por el eurodiputado catalán Jordi Solé, vicepresidente del grupo parlamentario Los Verdes/Alianza Libre Europea. El seminario se inauguró con una bienvenida de Jordi Solé, quien presentó el contexto crítico de los bosques de Cataluña. A la cita asistieron personas destacadas en el campo de varios centros de investigación e instituciones, entre ellas el CREAF.
Perdemos biodiversidad, es innegable, pero, ¿a qué ritmo? ¿Por qué? ¿Cómo nos afecta? Y, ¿qué podemos hacer? La Plataforma Intergubernamental de Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos (IPBES) responde estas preguntas desde su creación en 2012.
La comunidad científica ya ha demostrado que los bosques que crecen en un clima poco adecuado para ellos, como por ejemplo un abetal en un clima seco, fácilmente se ven más afectados por enfermedades o ataque de plagas.